El “Combo Deportivo de Caracol” fue más que un grupo de periodistas. Se convirtieron en los protagonistas de impacto de una ciudad que, con alma y cuerpo, se entregó a su equipo
Por Hegel Ortega. – El 30 de noviembre de 1999 no fue solo una final de fútbol, fue un espectáculo en el que la pasión y la euforia se desbordaron desde las gradas hasta las entrañas de la ciudad. El “Gran Combo Deportivo de Caracol”, liderado por Eugenio Baena, no solo narraba el partido; era el alma que encendía los corazones cartageneros. La canción “Arranca, Arranca Real”, interpretada por Juan Carlos Rebollo, se convirtió en el himno de una afición que llevaba años esperando ese momento, una melodía que vibraba en cada rincón del estadio Pedro de Heredia.
En aquella tarde mágica, Real Cartagena venció 2-1 a Rionegro, asegurando su ascenso a la primera división del fútbol colombiano. Los goles de Ferreira (45’ PT) y Villarreal (25’ ST) desataron la locura en el estadio, después de que Callejas (8’ PT) adelantara a los visitantes. La euforia alcanzó su punto más alto cuando el propio Juan Carlos Rebollo, en pleno éxtasis, desató tal emoción que “El Mono” Rebollo, en medio de la algarabía, no pudo evitar desnudarse en el estadio. Esto provocó la carcajada cómplice de la señora Yolanda Vázquez, madre del compañero Manolo Duque, quien, entre risas, exclamó con su picardía caribeña: “¡Qué lindo el gajo que mostró!” Las risas se esparcieron por todo el estadio, y entre canciones, cánticos y buscapiés, se vivió una celebración única que mezclaba el deporte con la chispa cultural de Cartagena.
El partido fue tenso, pero Real Cartagena mostró su carácter, apoyado por un equipo comprometido. Las alineaciones fueron las siguientes:
Real Cartagena:
Montero, Ordóñez, Asprilla, Viáfara, Bermejo, Zuluaga, Banguero, Becerra, Ferreira, Villarreal, Murillo. DT: Hernán Darío Herrera
Cambios: Manotas por Becerra (20’ ST), Rodríguez por Murillo (35’ ST).
Rionegro:
Hernández, Galeano, González, Castaño, Otálvaro, L. Montoya, Piedrahita, Vianchá, Callejas, Chica, Huertas. DT: Gonzalo Montoya
Cambios: J. Montoya por Chica (37’ ST).
El árbitro fue Flavio Rojas, en un partido que calificó como regular. No hubo expulsados.
Asistencia: 14000 espectadores aprox.
La voz de Hegel Ortega retumbó con fuerza, animando a la hinchada con tal ímpetu que el estadio parecía una fiesta de independencia, como si el Bando del 11 de noviembre se hubiera trasladado a la cancha. No se trataba solo de un ascenso, era una liberación colectiva, un sentimiento de años de sufrimiento que culminaba en un título histórico.
El “Combo Deportivo de Caracol” fue más que un grupo de periodistas. Se convirtieron en los protagonistas de impacto de una ciudad que, con alma y cuerpo, se entregó a su equipo. Fueron inspiración, compañía y aliento para un equipo que durante años vio el ascenso como una meta inalcanzable. Sin embargo, aquella tarde, la gloria finalmente llegó. Cartagena no lo olvidará